La odontología adhesiva se basa en el desarrollo de materiales que establecen un vínculo efectivo con los tejidos de los dientes. En este contexto, los sistemas adhesivos han atraído un considerable interés de investigación en los últimos años.
La unión adhesiva exitosa depende de la química del adhesivo, del manejo clínico apropiado del material, así como del conocimiento de los cambios morfológicos causados en el tejido dental por los diferentes procedimientos de unión.
Los adhesivos dentales se utilizan para varias aplicaciones clínicas y se pueden clasificar según el régimen clínico en adhesivos de grabado y enjuague y adhesivos de grabado automático. Otras consideraciones importantes se refieren a las diferentes características anatómicas del esmalte y la dentina que están involucradas en los procedimientos de unión que también tienen implicaciones para la técnica utilizada, así como para la calidad de la unión.
Los sistemas adhesivos de grabado y enjuague generalmente funcionan mejor en el esmalte que los sistemas de autograbado que pueden ser más adecuados para la unión a la dentina.
Para evitar una posible pérdida de la restauración, caries secundarias o daños en la pulpa debido a la penetración de bacterias o debido a los efectos de citotoxicidad de los componentes adhesivos eluidos, es esencial considerar cuidadosamente varios factores para seleccionar el procedimiento de unión y el sistema adhesivo adecuados para cada paciente.
