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¿Cuál es la diferencia entre una mascarilla quirúrgica y una mascarilla quirúrgica EPI (FFP)?

Una mascarilla quirúrgica es un dispositivo médico cuyo objetivo es evitar la proyección de las gotas emitidas por la persona que lleva la mascarilla hacia el entorno. También protege al usuario contra las proyecciones de gotas emitidas por otra persona.

Por lo tanto, protege las gotas en ambas direcciones. Sin embargo, no protege contra la inhalación de partículas muy pequeñas en el aire, por lo que el profesional no está protegido de partículas finas (aerosoles).

Hay tres tipos de mascarillas:

  • Tipo I: eficiencia de filtración bacteriana >95%.
  • Tipo II: eficiencia de filtración bacteriana >98%.
  • Tipo IIR: eficiencia de filtración bacteriana >98% y resistente a salpicaduras.

Las mascarillas quirúrgicas generalmente utilizadas en odontología son las IIR, o incluso II. El tiempo de uso recomendado por los fabricantes es muy difícil de encontrar, aunque aparentemente se recomienda cambiar la mascarilla cada 4 horas. Si la mascarilla se ha mojado, o si la temperatura es superior a 40°C, debe cambiarse inmediatamente. Para evitar la contaminación cruzada, es necesario cambiar la mascarilla entre cada paciente.

Una mascarilla de proteccion EPI (FFP) es un equipo de protección individual (EPI) que sirve como protección respiratoria. Su objetivo es proteger al usuario contra la inhalación de gotas, pero también de partículas en el aire, que pueden contener agentes infecciosos. Sin embargo, no protege completamente al paciente de la expiración de las partículas finas del profesional, sino más bien de las gotas. El uso de este tipo de mascarilla es más restrictivo (molestias térmicas, resistencia respiratoria) que el de una mascarilla quirúrgica.

Existen tres categorías de mascarillas FFP, dependiendo de su efectividad (estimadas en función de la efectividad del filtro y la fuga facial). Así, distinguimos:

  • Mascarillas FFP1 filtran al menos el 80% de los aerosoles (fuga total hacia el interior <22%).
  • Mascarillas FFP2 filtran al menos el 94% de los aerosoles (fuga interior total <8%).
  • Mascarillas FFP3 filtran al menos el 99% de los aerosoles (fuga interior total <2%).

Para el profesional odontólogo es necesario llevar una mascarilla FFP2. Si el virus se transmite solo por gotitas, la mascarilla FFP2 es suficiente. Si el virus puede sobrevivir en el aire sin una gota, su tamaño microscópico le permitirá pasar la barrera de la mascarilla. Por lo tanto, es necesario ejercer la mayor precaución y multiplicar las barreras protectoras (mascarillas, viseras, gorras, etc.), se puede hacer uso de doble mascarilla y colocar una mascarilla tipo FFP2 por encima de una mascarilla quirúrgica.

Los odontólogos también deben asegurarse de que las mascarillas se adapten bien a la forma de su cara y que no tengan fugas: para verificar el ajuste de una mascarilla de protección respiratoria, hay una prueba llamada Fit-Check: en ausencia de fugas, con inspiración forzada, con una lámina de plástico o con las manos en concha sobre la mascarilla, la mascarilla debe presionarse ligeramente sobre la cara.

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